1Enjuague adecuadamente los utensilios y esterilice los recipientes y accesorios.
2Preparar con agua hervida por 5 minutos y enfriarla hasta que quede tibia; en caso de no contar con esta se podrá utilizar agua purificada a temperatura ambiente.
3Primero sirva la cantidad necesaria de agua en el envase.
4Añada el número necesario de medidas al ras.
5Cierre el recipiente y agite hasta la completa disolución del polvo.
6Pruebe la temperatura dejando caer unas gotas en el dorso de la mano. El producto debe estar tibio. Utilícelo inmediatamente.